“Nuestra dificultad no está contenida, principalmente, en la situación que le dio origen, sino en el estado mental con que miramos la misma y que llevamos al enfrentarla”. –Caminos de Bendición 

Es una de las lecciones más difíciles de aceptar, comprender y aprender.

Las circunstancias no son negativas ni positivas, son neutrales.  Es nuestra manera de pensar, nuestro estado mental, nuestra perspectiva, lo que hace a la circunstancia positiva o negativa. 

Bob Proctor da una de las mejores enseñanzas sobre el tema utilizando una ley universal que denomina la Ley de Polaridad.

“Todo en el  universo tiene un opuesto.  No habría un interior de un cuarto sin un exterior.

Tenemos un lado derecho e izquierdo en el cuerpo, un frente y un trasero.  Toda subida tiene una bajada y toda bajada tiene una subida.  La Ley de Polaridad no solo plantea que todo tiene un opuesto—es igual y opuesto.  Si había un metro desde el piso hasta la mesa, habrá un metro desde la mesa hasta el piso.  Si hay 240 Km. de Manchester a Londres, por ley debe haber 240 Km. de Londres a Manchester; no puede ser de otra manera.

“Si algo que consideramos malo nos pasa en la vida, tiene que haber algo bueno en ello.  Si solo era un poco malo, cuando le damos la vuelta mentalmente veremos que del otro lado será tan sólo un poco bueno”.

Utilizando el ejemplo de Bob, cuando me hallo en circunstancias difíciles, las coloco en el medio de un círculo.  Entonces, mentalmente le doy la vuelta a la circunstancia hasta que me ponga del otro lado.  Entonces doy libertad a mi mente a examinar las cosas desde esa perspectiva… y nunca me desilusiona lo que encuentro.

Durante un tele-seminario que dirigí con Randy Gage, él usó un muy buen ejemplo de esto.  Mientras que la llanta desinflada parece una circunstancia negativa para nosotros, es una muy positiva para quien repara o vende llantas.  Viendo aún más allá es posible que mientras que reemplaza la llanta, el vendedor descubra un problema mucho más serio que nos pudiese haber costado mucho más dinero si se hubiese descubierto más tarde.

Así que es aún más claro a partir de la enseñanza de Bob que toda circunstancia puede ser vista de dos maneras.

Es la manera en que vemos una circunstancia la que determina su impacto en nuestro pensamiento y estado mental.  Y sabemos según la enseñanza de James Allen que eso determina la calidad de vida que vivimos.

 Sin importar cuán mala parezca la circunstancia, tomar otra mirada desde otra perspectiva, nos revela lo bueno.  O como Napoleón Hill, autor del clásico “Piense y Hágase Rico” escribió: “Cada adversidad, cada fracaso y cada dolor de cabeza lleva consigo la semilla de un beneficio equivalente o más grande”.

Vic Johnson
E

Meditación de www.AsAManThinketh.net

No podemos menos que estar de acuerdo con la meditación de hoy que, si bien es cierto que no tenemos mucho poder para escoger ó cambiar las circunstancias que atravesamos, sí lo tenemos para optar por la manera como reaccionamos a ellas.  Creo que resulta interesantísimo aquello de desarrollar una perspectiva positiva de todo lo que nos pase, aunque de momento, lo positivo sea mucho más evidente a otros que a nosotros.  Como creyentes en Cristo, esto debiera sonarnos familiar ya que promesa tenemos que a los que aman al Señor, todas las cosas habrán de resultar para bien… pero, ¿estaremos dispuestos a creer en lo que Dios nos plantea a pesar del dolor del momento?  En la respuesta a esa pregunta pudiese residir todo el secreto de la vida cristiana victoriosa y abundante.  Adelante y que Dios les bendiga.

Raúl Irigoyen.
El Pensamiento Del Capellán.