“La presión en el centro de la tierra es de 27 mil toneladas por Pulgada Cuadrada.

Solo un Dios grande es capaz de crear algo tan maravillosa como la tierra y con esa capacidad de soportar esa presión.

Los seres humanos no podemos soportar la presión del pecado oculto, por eso es mejor confesarlo”.

Serafín Contreras G.

Job 24:15  Los ojos del adúltero están pendientes de la noche; se dice a sí mismo: “No habrá quien me vea”, y mantiene oculto el rostro.

Salmos 69:5 Dios, tú conoces mi insensatez, y mis pecados no te son ocultos.

Marcos 4:22 Pues bien, nada hay oculto que no haya de ser manifestado, ni escondido que no haya de salir a luz.

Proverbios 28:13 El que oculta sus pecados no prosperará, pero el que los confiesa y se aparta de ellos alcanzará misericordia.