Cuando la noche se presenta muy tenebrosa
es cuando más se ve la luz de una vela solitaria.

Los fracasos no tienen por qué ser derrotas;
bien pueden ser peldaños para
alcanzar objetivos más altos.

Si se te están por agotar las pilas,
tómate un tiempo para recargarlas
conectando tus cables a Dios por
medio de la oración.

El odio que albergamos en el corazón
por nuestros enemigos propicia nuestra
derrota a manos de ellos.

El perdón, en cambio,
nos lleva a triunfar.

Una palmada en la espalda y un oído comprensivo
constituyen un valioso regalo que podemos hacer
a quienes trabajan y viven con nosotros.

Los momentos de crisis no hacen más
que incrementar el valor de esos gestos.

Cada error que se comete
es una oportunidad
de aprender algo nuevo.

Una amistad profunda es como un arco iris.
Cuando se combinan en justa medida la felicidad y las lágrimas,
el resultado es un puente de colores que une dos corazones.

Cuando te suceda algo malo,
piensa en todos los percances
que no se produjeron.

Pudo haber sido peor.

El amor es la mayor energía del universo.
Sin embargo, a diferencia de la electricidad,
no supone el pago de una cuenta a fin de mes.

La vida en el Cielo no consiste en
tocar el arpa en una nube lejana;
se asemeja mucho a la vida terrena,
solo que con mayor abundancia
de felicidad y belleza.

El amor es actuar…
…es demostrar a alguien que lo queremos
mediante hechos concretos, positivos
y sinceros que lo ayuden.

La vida premia a quienes perseveran.
El amor es la esencia de todo lo hermoso,
la fuerza que impulsa todo lo sublime.