El otro día una persona joven me preguntó que se sentía ser vieja, me sorprendió mucho, ya que no me considero vieja.Cuando vio mi reacción inmediatamente se apenó, pero le expliqué que era una pregunta interesante, y que la pensaría y le dejaría saber. Hacerse viejo, he decidido es un regalo. Yo soy ahora, probablemente por primera vez en mi vida la persona que siempre quise ser.

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