“Y Dijo Dios “Haya lumbreras en la expansión de los cielos para separar el día de la noche; y sirvan de señales para las estaciones, para días y años”. Génesis 1:14.

Hoy cuando me levante mis ojos buscaron con prisa el reloj para ver la hora y enseguida se fijaron en el calendario para ver el día.  Casi cada mañana sucede cuando despierto.  Pero en este día cuando lo hice algo muy especial y particular sucedió dentro de mi.

Mi pensamiento fue estimulado por esta verdad:  Qué es lo más importante….Mi calendario o el Calendario de Dios.  Se que las horas y los minutos son invención del hombre, pero los días y las noches, las semanas, los meses y los años son invención de Dios.  La Biblia lo dice que él estableció las épocas, el día y la noche y los años.  Si él hizo los días…entonces hoy debo vivir dentro de su calendario haciendo lo que él quiere que haga.

Hoy he aprendido que las invenciones de los hombres son pequeñas como los minutos y las horas,  pero las invenciones de Dios son grandes como los días, las noches, los meses y los años.  Los hechos de Dios son perfectos pero lo hechos de los hombres son imperfectos.  Si fue Dios quien hizo los días y las noches, entonces necesito aprender a vivir y moverme en el tiempo de Dios y en los tiempos de Dios.  Se que Dios tiene su tiempo específico para mi vida, mi familia y mi ministerio.  En su tiempo él hace sus obras, necesito por lo tanto aprender a ajustar las obras mías a las obras de Dios.

El calendario de Dios es cumplido en un ambiente de amor.. mientras que mi calendario es cumplido a veces con molestia, malestar y angustia.  El calendario de  Dios está rodeado de perfección y paz, el mío está lleno de desajustes, imperfecciones y conflictos.

Hoy quiero conocer el calendario de Dios para mi vida y lo podré conocer cuando aparto tiempo para encontrarme con él. Oh, cuantas veces mi propio calendario ha hecho a un lado el calendario de Dios.  Me cuesta entender que tal cosa es injusta y trae consecuencias no agradables para mi y para quienes me rodean..pero hoy quiero caminar y vivir en el calendario de Dios.

Señor, Gracias por darme la oportunidad de caminar en este día en tu calendario.  Se que mi impulso humano es aferrarme al calendario propio.  Al calendario que yo mismo he hecho, pero eso no tiene sentido.  Hoy, quiero acercarme a ti con sinceridad y decirte:  Padre, ayúdame a buscar tu calendario y aprender a moverme en tu tiempo y a discernir tu tiempo para mi y para mi familia.  Amén.

Dr.Serafín Contreras Galeano.
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