“Los mejores santos han bebido del agua amarga.  Los más estimados hijos de Dios han cargado en algún momento la cruz.  Ningún cristiano ha disfrutado prosperidad perpetua, ningún creyente a tocado todo el tiempo el arpa bajo los sauces.  Lo que Dios ha estado trabajando en mí fuertemente es mi madurez y la madurez se adquiere en los climas templados y las experiencias duras de la vida”.

Serafín Contreras G.

 

Mateo 26:75.  Entonces Pedro se acordó de las palabras de Jesús, que le había dicho: Antes que cante el gallo, me negarás tres veces. Y saliendo fuera, lloró amargamente.

Santiago 1:2-4 Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas, sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia.  Mas tenga la paciencia su obra completa, para que seáis perfectos y cabales, sin que os falte cosa alguna.