“Cuando niño vi crecer el amor a la distancia. Me parecía muy lejos, algo que no podía tener. Solitario y cabizbajo camine sin comprender que muy cerca él se encontraba para hacerme entender, que el amor no estaba lejos. Él era fuente misma que comenzaba a correr. Hoy ya no lo veo a la distancia porque invadió todo mi ser”.

Serafin Contreras G.